Para muchos es complicado el recuperar lo perdido. Es un reto más que exigente y en ocasiones puedes terminar con menos de lo que una vez te quitaron, pero hay casos excepcionales donde la revancha se hace presente y triunfa, y en el Toyota Arena en Ontario, California, Jermell Charlo tuvo su redención.
En diciembre de 2018, una derrota por decisión unánime le quitó el título CMB de los superwélter. Tony Harrison fue el responsable de una de las derrotas más inesperadas del año pasado, pero esa caída no podía, no debía quedarse ahí, y luego de casi 12 meses, Charlo y Harrison se volvieron a ver las caras, esta vez en una reyerta que se resolvería sin la necesidad de las tarjetas.
La contienda inició con un Jermell sediento de sangre y golpes. Ya en el segundo asalto, Tony ya estaba besando el suelo luego de un cruzado de izquierda que le dejó sin control de sus piernas y a merced de la gravedad. El conteo apareció, lo superó y continuó a falta de seis segundos del final del round. Una campanada salvavidas que le ayudaría mucho para el resto del combate.
Desde el tercer round, Harrison sacó a flote la chapa de campeón para sobreponerse a la caída y a la presión que su rival le iba a tratar de imponer implementando un boxeo de control, muy táctico y técnico, el cual complemento con ataques precisos y enfocados a desgastar el físico de su rival poco a poco, trabajo que cumplió al pie de la letra, frenando el ímpetu de Charlo, quien nunca pudo encontrar, en ese momento, la manera de contrarrestar la estrategia del campeón.
Pero en el boxeo nunca puedes dar nada por hecho. El campeón defensor tenía casi la totalidad de los asaltos a su favor desde el tercero. Su plan estaba funcionando a la perfección, pero justo en el momento clave de la contienda, en los rounds de campeonato, el dueño del fajón verde y dorado, perdió el orden defensivo y la pelea.
Charlo salió a todo o nada en el undécimo. Sabía que de llegar a las tarjetas perdería y ya no había espacio para ser cuidadoso, de tal manera que puso en escena todo su repertorio de golpes, en una ráfaga que nubló por completo a Tony, quien no supo pelear la parte final de la reyerta, y terminó dos veces en la lona. Sorprendentemente se recuperó y se dispuso a seguir luchando, pero una nueva arremetida de Charlo fue suficiente para que el juez determinara el fin de las acciones.
Nocaut técnico para Jermell Charlo. Victoria 33, la 17 por la vía rápida para recuperar lo que una vez perdió hace un año, pero que supo tener la gallardía y entrega para recuperar, dejando vía libre a un 2020 de retos importantes en la división de los superwélter.
Por: Mauro Alfonso París | Twitter: @MauroMet94