Javier Fortuna no pudo dar el peso para su contienda de título mundial ante Robert Easter, dueño del fajón de la FIB en el peso ligero. El día del pesaje, en el cual dio 136.4 libras, alegó que no estaba acostumbrado al clima de Nueva York y posterior a su derrota ante Easter, dijo que no tuvo el tiempo suficiente para entrenar y llegar con las libras correctas.
El dominicano expone dos escenarios, donde el segundo, el poco tiempo de entrenamiento, cuenta con mayor campo de explicación, ya que es de vital importancia la cantidad de semanas que tendrás para tu campamento porque con esto puedes elaborar todo el plan de entrenamientos físicos y técnicos, además de la nutrición, el factor clave en este caso.
Fortuna tuvo poco más de un mes para cerrar su preparación. El 20 de diciembre del 2017 viajó a los Estados Unidos para la etapa final de su campamento, teniendo unas semanas para ponerse a punto. Pero antes del viaje ya debió haber iniciado los trabajos de acondicionamiento, del control del peso y la nutrición. Ya para la fecha del traslado a territorio norteamericano debía tener muy adelantada su preparación.
Pasado el nuevo año le quedaban dos semanas antes de la pelea. En ese periodo de tiempo se recomienda un cambio en la alimentación que se llevaba realizando. Este cambio consiste en reducir la cantidad de productos que contengan carbohidratos (pan, patatas, pastas, etc), sal común y líquidos. Acá se pide que se coma la cantidad suficiente de proteínas, vitaminas y minerales (carne, pescado, pollo, huevos, legumbres, frutas y jugos naturales).
Ya en la previa de la velada de pesaje, algunos recomiendan el consumo de carnes; para tratar de fortalecer los músculos y huesos, que han sido afectados por una reducción peso. En estos días es inevitable impedir que el peleador consuma líquidos, pero debe realizarse con mesura.
Estos y otras recomendaciones se deben realizar al pie de la letra para no tener problemas con el peso, algo que al final fortuna tuvo, ¿Y dónde queda el tema climático? Si Fortuna sufrió por estar en un lugar con temperatura baja que no le permitía sudar, pues en esos casos se recomienda el uso de ropa de abrigo para aumentar la sudoración, pero esto no termina siendo la razón principal de su fallo en la báscula, puesto que para su segundo intento, cuando quiso dar el peso, estuvo en una cámara de vapor, lo cual no dio resultado alguno.
Acá obviamente hubo un claro problema de preparación y planificación. Si se contaba con un buen historial de pesajes, ¿por qué fallar ad portas de un reto mundialista? Esta situación termina dejando dudas sobre el campamento del dominicano, máxime cuando fue campeón en categorías menores, como la de las 126 y 130 libras.
Por: Redacción BDC Internacional