Ángel ‘Tito’ Acosta (18-1, 18 KOs) detuvo en el último round de la contienda a un Carlos Buitrago que vendió muy cara su derrota en Hato Rey, Puerto Rico, marco en el que se dio la primera defensa de su cetro de la OMB en el peso minimosca.
Acosta intentó buscar un nocaut prematuro, pero toda la experiencia de Buitrago salió a relucir para aguantar la embestida del campeón con su jab de zurda.
Toda la veteranía del nicaragüense desnudó una falencia defensiva en Acosta. El gancho de derecha de Buitrago siempre rompió la guardia del puertorriqueño.
En cuanto a técnica todo estaba igualado, pero la fogosidad de Acosta era mayor, acorralando a Buitrago, quien resistió varios aluviones, saliendo afectado de varios de ellos, pero también sabiendo sobrevivir de muchos con excelsos movimientos de cintura.
El nicaragüense expuso una táctica defensiva, basada en el contragolpe y en encontrar manos sueltas que dañaran a Acosta, quien tiraba sin ahorrarse golpe alguno, pero muchos de ellos iban a parar al aire.
La frustración y el cansancio físico hicieron mella en el performance de Acosta, quien ya no presionaba igual y lanzaba golpes con menos poderío en la segunda parte de la contienda, y es que pocos se imaginaron que Buitrago iba a extender el combate, máxime cuando el monarca había noqueado en todas sus 17 victorias anteriores.
Ante esto, Buitrago salió de su guarida y se plantó en el centro del ring, intercambiando a la par y viéndose más agresivo que al inicio, achicando la diferencia que Acosta había obtenido en el inicio.
Sin embargo, para la última parte de la pelea Buitrago dejó de carburar y Acosta volvió a montarse en la pelea, aunque sin la intensidad de las primeras de cambio.
No obstante, esto le bastó a Acosta para en el último capítulo tirar contra las cuerdas a Buitrago, obligando al árbitro a hacer el conteo de protección. Buitrago se puso en pie pero para seguir siendo castigado y para que en esta vez el árbitro Luis Pabón pusiera punto final al asunto, dándole el nocaut 18 en igual número de victorias a un peleador al que parecía que se le esfumaba su racha de cloroformo.
Por: Redacción BDC Internacional – Foto: Miguel Cotto Promociones
