Guillermo Rigondeaux siguió cada detalle de la victoria de Vasyl Lomachenko sobre Miguel Marriaga del pasado 5 de agosto, en el Microsoft Theatre en Los Ángeles, California. El cubano cree firmemente, luego de ver la manera de luchar del ucraniano, que le vencería en un enfrentamiento.
«Es muy fácil luchar ante alguien que no está peleando. Creo que es momento que enfrente a alguien que sí peleará, y ese soy yo», dijo.
Rigondeaux fue testigo privilegiado de muchas de las fallas cometidas por Vasyl ante Marriga. Una de las más repetidas de esa noche y de sus últimas peleas, es luchar con las manos por la cintura, una posición que ante el poderío de los puños de Guillermo sería poco recomendable.
Lomachenko ha venido ejecutando ese poco profesional hábito de pelea, además de sobrar en algunas oportunidades a sus rivales. Hasta el momento le ha salido, pero ante un rival de peso tendría que cambiar de actitud o sufriría un castigo importante en el ring.
Guillermo es uno de sus posibles oponentes de élite a futuro, ya el cubano calentó la previa con una frase contundente: «Detendré a ese tipo», ¿Aceptará Vasyl el reto de Rigondeaux o se mantendrá en luchas de mediano nivel?
Por: Redacción BDC Internacional – Foto: Mpsportimages.com
