El árbitro retirado, Joe Cortez, le gano la lucha al COVID-19 y si bien aún permanece en un hospital de Las Vegas, él mismo reveló que las últimas dos pruebas para detectar el virus, fueron negativas; y ahora el proceso para volver a casa, después de nueve semanas bajo observación médica, comenzará en pocos días.
“Estaré en rehabilitación por un día o dos y luego me iré a casa. Estaba contra las cuerdas, pero me mantuve fuerte porque no voy a perder esta pelea por mí, mi familia y mi gente de Puerto Rico”, le dijo Cortez a Carlos González.
Joe ingresó al hospital en noviembre del año anterior y fue conectado a un ventilador para recibir asistencia respiratoria, y ahora, aseguró que solo tiene un tubo conectado para mejorar la oxigenación de los pulmones.
“El COVID-19 es grave, pero puedo decir que estoy limpio. En las dos pruebas que hicieron, salí negativo. Ya no tengo el virus y estamos avanzando. Me siento bien. Nunca había pasado por algo así y tenemos que aprender a escuchar a los médicos, mantener la distancia, usar las máscaras, no estar en grupos grandes y quedarnos en casa el mayor tiempo posible. Esto no es una broma, es real y tenemos que cuidarnos unos a otros”, afirmó.
Finalmente, el exábitro explicó que, como parte de su rehabilitación, tendrá que recuperar el movimiento de sus extremidades después de permanecer en cama tanto tiempo. “Me harán caminar, pararme y aprender a ponerme la ropa después de casi dos meses en el hospital”, sentenció Cortez.
Por: Redacción BDC.
