Una pelea más que entretenida brindaron José Carlos Ramírez y Viktor Postol en Las Vegas y que mantuvo al mexicano-estadounidense como campeón mundial súper ligero de la OMB y el CMB con cartones mayoritarios de 114-114, 115-113, 116-112.
Cada uno con su estilo. Ramírez con más agresividad, Postol con más inteligencia entendiendo su menor poder de pegada, pero permanentemente rebotando sobre el cuadrilátero. Ambos exhibieron una gran condición física para mantenerse así durante todos los doce rounds.
Incluso, fue Postol el que más golpes lanzó, pero el que aterrizó más puños de poder fue Ramírez. Una pelea que valió la pena esperar, debido a que fue aplazada en dos ocasiones por la pandemia COVID-19.
En el primer asalto fue Ramírez el que salió a presionar, sin dar espacio al estudio y sorprendiendo a Postol, quien se vio acorralado contra las cuerdas y con pocas oportunidades de acomodarse sobre el cuadrilátero.
Sin embargo, Postol descifró muy rápido la estrategia de Ramírez y con pasos laterales y con permanentes movimientos se mantuvo al margen de un pegador que tiene mayor poder de pegada y que le dejó maltratado su ojo derecho.
El ucraniano incomodó al campeón, tanto así que el mexicano-estadounidense cambió su plan de lucha y dejó de perseguir a Postol y prefirió esperar momentos propicios para entrar en el cuerpo a cuerpo.
Eran rounds que se dividían, pero dejando mejores sensaciones Postol en la primera mitad de la pelea, debido a su estrategia y boxeo inteligente que lo mantenían con el jab lejos del alcance de Ramírez.
Sin embargo, en la segunda parte de la contienda, Postol comenzó a quedarse y su movimiento de piernas ya no era tan efectivo y se ralentizó, tanto que le permitió a Ramírez acercarse más y empezar con un castigo más efectivo.
Ya eran más los golpes que entraron a la humanidad de Postol, minando especialmente al cuerpo del ‘Ice Man’, quien respondía con contragolpes al rostro y con su movimiento para mantenerse lejos de Ramírez.
Ni siquiera en los llamados rounds de campeonatos estos dos gladiadores dejaron de dar buen boxeo, cada uno conservando su estilo. Ramírez yendo hacia adelante y Postol moviéndose, pero animándose a más intercambios.
Ahora, Ramírez (26-0, 17 KOs) espera una unificación con Josh Taylor, campeón de la FIB, aunque tiene compromisos obligatorios por la OMB y el CMB.
Por: Jeffry Almarales Nieto
